En medio de un intenso debate nacional sobre los límites del poder y la libertad de expresión, la senadora y precandidata presidencial María Fernanda Cabal lanzó un contundente mensaje en su cuenta de X (antes Twitter) que ha resonado profundamente entre millones de colombianos preocupados por el rumbo del país. Con firmeza y convicción patriótica, cuestionó las tendencias autoritarias que, a su juicio, se han consolidado bajo el gobierno del presidente Gustavo Petro.
Luego del bochornoso acto del presidente Petro en EE. UU. gritando con un megáfono en Nueva York, lanzando mensajes contra el presidente de ese país, Donald Trump, y promoviendo la desobediencia de las Fuerzas militares de ese país, María Fernanda Cabal publicó en X:
«¿Le aplicarán la Ley de Sedición de 1918 de EE. UU.? Petro no es Colombia, no representa a millones de colombianos que trabajan con amor por sus familias y por esta Patria. En 2026 vamos a devolverle la dignidad a esta Patria. Dios con nosotros, ¿quién contra Él?», escribió la legisladora en un trino que ya ha generado interacciones y reacciones en redes sociales.
Una advertencia histórica con vigencia actual
La referencia de Cabal a la Ley de Sedición de 1918 de Estados Unidos no es casual. Se trata de una norma promulgada durante la Primera Guerra Mundial que amplió de forma drástica las restricciones a la libertad de expresión en ese país. Esta ley, enmienda a la Ley de Espionaje de 1917, que criminaliza cualquier discurso considerado “desleal”, “antipatriótico” o crítico del gobierno, las Fuerzas Armadas o el esfuerzo bélico, incluso permitía al director general de correos interceptar correspondencia sospechosa y condenaba a ciudadanos a multas millonarias o largas penas de prisión por expresar opiniones disidentes.
Al evocar esta ley, Cabal no solo hace una analogía contundente, sino que alerta sobre posibles derroteros autoritarios en Colombia, donde, según denuncia, se busca silenciar a quienes discrepan del actual gobierno.
“Petro no es Colombia”, subraya con claridad, recordando que el país es mucho más que una sola persona, es la suma de millones de ciudadanos que, día a día, construyen el futuro con trabajo, fe y amor por la Patria.
Un llamado a la esperanza y a la unidad nacional
Más allá de la crítica, el mensaje de Cabal es profundamente esperanzador. Al afirmar que “en 2026 vamos a devolverle la dignidad a esta Patria”, la senadora no solo reafirma su intención de aspirar a la Presidencia, sino que invita a los colombianos a recuperar el orgullo nacional, los valores democráticos y el respeto por las instituciones.
Su cierre, “Dios con nosotros, ¿quién contra Él?” refleja la fe inquebrantable que la caracteriza y que ha sido un pilar de su trayectoria política. Es un grito de resistencia pacífica, de defensa de la libertad y de confianza en el pueblo colombiano como verdadero protagonista del destino nacional.
En un momento en que muchos sienten que sus voces son ignoradas o incluso castigadas, María Fernanda Cabal emerge como una voz clara, valiente y coherente. Su mensaje no es de división, sino de reafirmación de la identidad democrática de Colombia y un recordatorio de que ningún gobierno puede arrogarse el derecho de representar en exclusiva a una nación diversa, trabajadora y profundamente patriótica.
Con miras a las elecciones de 2026, Cabal no solo construye una plataforma política, sino que enciende una llama de esperanza para quienes creen en un país libre, próspero y digno. Y en ese camino, su voz resuena con la fuerza de quienes no temen decir lo que piensan, en defensa de la libertad y del alma de Colombia.
