Tras casi un mes del ataque que dejó 13 policías muertos, el Ministerio de Defensa confirmó la muerte de dos jefes de las disidencias responsables del atentado. Junto a ellos cayeron dos integrantes más de la estructura criminal bajo el mando de alias ‘Calarcá’.
A través de sus canales oficiales de información, el Ministerio de Defensa confirmó este jueves que en un operativo de la Fuerza Pública en Antioquia fueron neutralizados dos de los principales responsables del ataque con explosivos que el pasado 21 de agosto segó la vida de 13 policías en Amalfi.
Se trata de alias ‘Román’ y alias ‘Guillermino’ o ‘Zarco’, jefes del Bloque Magdalena Medio de las disidencias de las FARC, bajo el mando de alias ‘Calarcá’. Según la información oficial, ambos eran considerados piezas clave en la estructura criminal por su experiencia en la instalación de artefactos explosivos y emboscadas contra la Fuerza Pública.
“El sacrificio de nuestros 13 policías en Amalfi jamás será olvidado. Este resultado honra su memoria y envía un mensaje claro: quien atenta contra un policía o un soldado atenta contra Colombia, y tarde o temprano deberá pagar las consecuencias”, señaló el Ministerio en un comunicado.
Durante la operación, desarrollada en zona rural de Antioquia, también murieron otros dos integrantes de la misma estructura, lo que representa un golpe significativo a la capacidad de acción del grupo armado. El Gobierno destacó que con estas bajas se debilitan los planes que buscaban extender la intimidación en comunidades de la región y atentar nuevamente contra uniformados.
La masacre de Amalfi, ocurrida en un área minera del nordeste antioqueño, conmocionó al país por el alto número de víctimas en un solo hecho y por la sevicia con la que fue ejecutado. Los 13 policías se movilizaban en un vehículo cuando fueron sorprendidos por un campo minado que, de acuerdo con la investigación, había sido instalado por los hoy neutralizados.
Finalmente, desde las Fuerzas Armadas resaltaron que este resultado, aunque no devuelve la vida de los uniformados, constituye una señal de respuesta contundente contra quienes desafían la seguridad nacional. “La criminalidad pierde a dos de sus hombres más peligrosos y expertos en violencia. Sus planes ya no podrán volver a sembrar miedo ni a poner en riesgo a nuestras comunidades y a los héroes de la Patria”, puntualizó el Ministerio de Defensa.