Coviandina reportó que continúa el cierre total entre los kilómetros K18+300 y K18+600 por caída de material. No hay estimado de reapertura. La Policía de Tránsito habilitó un bypass en el K18+500 exclusivamente para residentes.
La movilidad por la vía Bogotá–Villavicencio sigue seriamente afectada este lunes, según el más reciente informe de la concesionaria Coviandina. El tramo entre los kilómetros K18+300 y K18+600 permanece cerrado en su totalidad, debido a la caída de material y a las labores de limpieza en curso.
No hay estimación oficial de reapertura, lo que ha prolongado las restricciones de tránsito y los desvíos logísticos en uno de los corredores más importantes del país. Se mantienen habilitados los puntos de control el K0+000 (sentido Bogotá – Villavicencio) y en el K82+700 (sentido Villavicencio – Bogotá).
Además, en el K39+600, las autoridades implementaron una reducción de carril, lo que ha generado tráfico lento y congestión. En los túneles de la nueva calzada, se mantiene el tráfico bidireccional, como medida temporal para facilitar la movilidad mientras persisten los cierres en la calzada principal.
Uno de los puntos más delicados es el bypass habilitado en el K18+500, el cual solo puede ser utilizado por residentes o usuarios locales. La Policía de Tránsito insiste en que quienes no vivan en la zona no deben intentar acceder por ese sector, ya que será restringido el paso y se pueden generar mayores demoras.
Desde Coviandina se reiteró el llamado a los conductores a acatar las instrucciones de las autoridades y evitar contratiempos. Se recomienda reprogramar desplazamientos, consultar el estado de la vía en tiempo real y prever tiempos adicionales si es indispensable transitar por el corredor.