María Fernanda Cabal rechazó intentos autócratas de Petro y su reforma laboral

“No le vamos a tolerar sus intentos autócratas”, le dijo la aspirante presidencial a Gustavo Petro. Además, rechazó la reforma laboral que, en su concepto “solo deja más despidos” y cuestionó su falta de respeto por la Constitución.

En medio de un debate legislativo que ha polarizado al país, la senadora y precandidata presidencial María Fernanda Cabal lanzó una contundente denuncia contra el gobierno del presidente Gustavo Petro.

La senadora Cabal calificó las maniobras políticas de Petro como “intentos autócratas” advirtiendo sobre las consecuencias devastadoras de la reforma laboral propuesta por el Ejecutivo. A través de una publicación en X (anteriormente Twitter), afirmó:

«¡No más Petro! Sabemos que por su pasado en la subversión jamás entendió lo que significa respeto por la Constitución y la Ley, pero no le vamos a tolerar sus intentos autócratas».

La publicación, acompañada de una imagen que muestra una presunta contradicción entre las palabras del mandatario y la realidad económica del país, encendió una ola de reacciones en redes sociales y marcó un punto de inflexión en el debate sobre la reforma laboral que actualmente se tramita en el Congreso.

Irrespeto por la Constitución

El mensaje de la líder opositora Cabal no solo representa una defensa intransigente del Estado de derecho, sino también una clara advertencia frente a lo que considera una deriva autoritaria del primer gobierno de izquierda en la historia reciente de Colombia.

Al señalar que Petro “jamás entendió lo que significa respeto por la Constitución”, la parlamentaria hace referencia directa al pasado guerrillero del presidente en el M-19, recordando públicamente sus orígenes políticos y cuestionando su compromiso con las instituciones democráticas.

Este tipo de discurso, aunque polémico, refleja una preocupación creciente dentro de sectores conservadores y centristas del país, quienes ven con recelo la manera en que el gobierno Petro ha abordado algunos temas estratégicos ante el Congreso.

¿Incoherencias o explicaciones innecesarias?

En el mensaje de la precandidata María Fernanda Cabal, se muestra una captura del trino del presidente Petro inicialmente pidiendo se avance en la aprobación de la reforma laboral, sin embrago, incluye un mensaje directo de no estar involucrado con el atentado del senador Miguel Uribe, esto ha puesto en confusión a distintos sectores sociales y económicos del país, como la mayoría de las palabras que suele soltar el Ejecutivo.

¿Su afán es que se firme la reforma o el temor que definitivamente lo asocien con lo ocurrido al precandidato Uribe Turbay? ¿O las dos?

La resistencia del Senado

Cabal enfatizó que el Senado no es “la Cámara”, haciendo alusión a la mayoría relativa que el oficialismo tiene en esa corporación, mientras que en el Senado existe una oposición más representativa. Su mensaje es claro: no permitirá que el proyecto avance sin un análisis profundo y responsable.

Este posicionamiento coincide con una tendencia en la alta cámara, donde ya se han presentado múltiples objeciones técnicas y constitucionales al proyecto. De hecho, varios senadores de diferentes partidos han señalado que la iniciativa carece de estudios serios de impacto socioeconómico y que su redacción es ambigua en aspectos clave.

Entre el debate político y la responsabilidad social

La respuesta de la senadora María Fernanda Cabal no puede entenderse únicamente como una crítica política. Representa, en cierta medida, el clamor de un sector importante de la sociedad civil que ve con preocupación cómo se están tomando decisiones que afectan profundamente el futuro económico del país.

Su defensa del Estado Social de Derecho, su rechazo al autoritarismo y su llamado al rigor legislativo son elementos fundamentales en un momento en que el país atraviesa una crisis de confianza institucional. Pero, más allá del discurso, lo que realmente está en juego es la calidad de vida de millones de trabajadores que esperan soluciones reales, no experimentos ideológicos mal estructurados.

Mientras continúa el debate, el Senado tendrá la última palabra. Y si las voces como la de Cabal logran imponerse, la reforma laboral tal como se plantea probablemente no sobrevivirá intacta al escrutinio público y técnico que exige la gravedad del asunto.