La solicitud fue hecha en el departamento de Córdoba, donde se hizo efectiva la primera entrega de tierras enmarcada dentro de la Reforma Rural Integral que se llevará a cabo con la participación de Fedegán y sus agremiados.
Luego de la polvareda que se armó tras las declaraciones del presidente Gustavo Petro apremiando a los ganaderos a cumplir con su palabra de ofertar y vender tres millones de hectáreas para la ejecución de la Reforma Rula Integral, uno de los programas bandera de su Gobierno, se hizo oficial la primera entrega de tierras a campesinos necesitados o carentes de ella.
Se trata de 29 predios que suman en total 3500 hectáreas y son el primer bloque de terrenos adquiridos por el Gobierno en el marco del acuerdo firmado el pasado mes de octubre con la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán), dando formalmente inicio a la ejecución e implementación de la Reforma Rural Integral.
En el acto de entrega, el presidente Gustavo Petro habló a los asistentes y empresarios del ganado en general, sobre la necesidad de implementar en todos los hatos del país un modelo gestión ambiental que desde hace años Fedegán viene impulsando: los sistemas silvopastoriles.
“A los grandes ganaderos les queremos hacer un negocio: más vacas, menos tierra. Ese es el principio de la Reforma Agraria que les proponemos. ¿Cómo pueden tener más vacas y menos tierras? Pues con otros pastos, con la técnica silvopastoril, sembrando árboles con frutos adecuados, ayudados por nosotros. Lo que yo les propongo es que se vuelvan más ricos, pero a cambio de un pedazo de tierra, que nos vendan esa tierra”, dijo el jefe de Estado.
Fedegán ha hecho pedagogía
Como bien lo explica Ricardo Arenas en el Manual Práctico Ganadero, programa de educación ejecutado por Fedegán, los Sistemas Silvopastoriles (SSP) son un modelo de gestión agrícola que permite o sugiere a la empresa ganadera la combinación de plantas forrajeras como pastos y leguminosas rastreras, con arbustos y árboles destinados a la alimentación animal y usos complementarios en un mismo terreno.
Estos sistemas permiten la tenencia de más animales en un mismo espacio y, también, propician el levantamiento de distintos tipos de vegetación, asegurando tres modalidades de alimentación animal: pastoreo, ramoneo o corte y acarreo; además de eso, es posible que coexistan en el mismo espacio árboles maderables, frutales, ornamentales y otros que ayuden a mejorar el bienestar animal.
La propuesta del presidente Petro está acompasada con la preocupación de Fedegán por contribuir con la preservación del medioambiente y la idea de ejecutar en el país prácticas ganaderas sostenibles que permitan, además de mejorar los ingresos de las empresas, acabar de una vez por todas con los mitos que desde años han venido rodeando a este sector.
Son muchos los espacios y eventos donde José Félix Lafaurie, presidente ejecutivo de Fedegán, ha tratado de explicar a los más de 700.000 ganaderos del país, la importancia de transitar de la ganadería extensiva a la ganadería sostenible, atendiendo no solo a las exigencias del mundo actual en ese sentido, sino también, buscando hacer más rentables y productivos los hatos.
“La ganadería sostenible es la respuesta a nuestra responsabilidad con la preservación de la naturaleza, pero es aún más que eso: es también la ruta obligada de modernización productiva a partir de la utilización racional de los recursos y es apenas obvio, le estoy hablando de un gran salto de la productividad y la rentabilidad del negocio ganadero, pero también de las amenazas de no seguir esa ruta y perder capacidad de respuesta frente a los consumidores y a las preocupaciones ambientales del planeta”, enfatizó Lafaurie.
Finalmente, sobre este particular, detalla Ricardo Arenas, conocido como el Profesional Ganadero Amigo, que la implementación de estos modelos de gestión agraria permite disminuir costos en el levantamiento de los animales, pues, son muchas las ventajas que ofrecen para el sector ganadero.
“La producción agropecuaria debe ser siempre amigable con el medio ambiente. Los sistemas silvopastoriles propician un microclima ideal para el ganado: ellos dan sombra, disminuyen los vientos ayudando al bienestar animal, a la productividad y evitan la dispersión de enfermedades, además, reducen el uso de alimentos concentrados, puesto que los árboles y arbustos mejoran la calidad de la alimentación y ofrecen alimentación todo el año”, puntualizó Arenas.