En los municipios de Cumbitara y Policarpa, en Nariño, tres personas se entregaron a las autoridades, junto con material bélico, incluyendo un dron.
En el marco de los recientes operativos militares en Nariño, las tropas del Ejército Nacional lograron la rendición de un menor y dos miembros de grupos armados ilegales, uno de ellos operador de drones explosivos.
La ofensiva militar, desplegada principalmente en los municipios de Cumbitara y Policarpa, generó una presión que habría llevado a estos individuos a abandonar sus actividades ilícitas.
En el primer incidente, ocurrido en Cumbitara, un hombre que se identificó como miembro de las Autodefensas Unidas de Nariño se entregó a las fuerzas militares, manifestando su intención de abandonar la ilegalidad.
El individuo entregó un dron, dos baterías y 18 artefactos explosivos improvisados que se utilizaban para lanzar desde drones. Estos dispositivos fueron destruidos de forma controlada por las autoridades, siguiendo todos los protocolos de seguridad.
En un segundo evento, en el municipio de Policarpa, otro hombre junto a un menor de edad, ambos presuntos integrantes del Grupo Armado Organizado residual (GAO-r) de la estructura Franco Benavides, también se entregaron a las autoridades.
En su posesión tenían dos armas largas, diez proveedores, 297 cartuchos de munición calibre 5.56 mm y otros elementos de uso militar.
Los sujetos y el material incautado fueron puestos a disposición de las autoridades correspondientes, mientras que el menor de edad fue puesto bajo el cuidado del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) para el restablecimiento de sus derechos.
