Según una investigación periodística respaldada con datos de la Fiscalía, antes de la creación del Fondo para la Reparación de las Víctimas (FRV), un poco más del 87% de muebles e inmuebles aportados habían cumplido con ese objetivo.
Hace dos días, la Fundación Paz y Reconciliación tituló así una de las entradas de su página web: Se robaron 400 bienes que entregó Mancuso para reparar víctimas en tiempos de Álvaro Uribe.
En los cinco párrafos de la nota, aunque no lo dicen de manera literal, sí insinúan que los funcionarios de los gobiernos Uribe con competencia para tales fines, fueron los encargados de desaparecer el rastro de esos inmuebles.
Esa tesis fue fortalecida por las declaraciones a este respecto entregadas por el exjefe paramilitar y la actitud pasiva de los funcionarios del gobierno Petro que lo acompañaron en el evento y, a quienes luces les sirve seguir validando ese tipo de discursos para hacer política.
“Hoy denunciamos que no aparecen alrededor de 400 bienes que en su momento fueron entregados para la reparación de las víctimas del paramilitarismo”, dijo Salvatore Mancuso en el marco del encuentro que sostuvo con Lilia Solano, directora de Unidad para las Víctimas (Uariv), y Felipe Harman, director de la Agencia Nacional de Tierras (ANT).
Secundando estas afirmaciones, Lilia Solano hizo énfasis en las dudas que existen sobre el ingreso de los inmuebles referenciados a los ‘inventarios’ de la entidad que dirige, fortaleciendo un discurso que se demostraría casi de inmediato es engañoso.
“Hoy hemos podido hablar también desde lo humano, pero lo fundamental es la reparación a las víctimas y del compromiso que tiene hoy Mancuso para encontrar los bienes para reparar a las víctimas, que entregó y no están completos en nuestro listado”, comentó la funcionaria.
Tras el revuelo que causaron las afirmaciones del exjefe paramilitar por cuenta del interés del gobierno en hacerlo partícipe del proyecto de Paz Total del presidente Petro, el portal Verdad Abierta verificó lo dicho y sus conclusiones dieron al traste con la ‘denuncia’ de Mancuso.
La investigación periodística publicada recientemente, sostiene que casi la totalidad de los inmuebles ofrecidos por Salvatore Mancuso para hacer efectiva la reparación a sus víctimas, cumplieron con ese objetivo antes de que se diera vida jurídica al Fondo para la Reparación de las Víctimas (FRV), razón por la cual no hay registro de los mismos en sus bases de datos.
En uno de los apartes, la nota precisa que “la suerte de los bienes que están relacionados con Mancuso se agrupan principalmente en cuatro categorías: los que fueron restituidos directamente —con anterioridad de la Ley de Víctimas y por ende a la creación de la Unidad de Restitución de Tierras—, los que se debaten en juzgados de restitución, los que administra el FRV de la Unidad para las Víctimas, y los que están en investigación de la Fiscalía”.
Igualmente, advierte la Fiscalía ha establecido que al menos 100 de los bienes que aparecen registrados en los inventarios de Mancuso no tienen elementos suficientes que permitan verificar su real existencia ni la ubicación, dejando sin piso lo dicho por el ‘gestor de paz’ y los altos funcionarios del gobierno Petro.
Este episodio deja al descubierto una vez más la poca voluntad del gobierno por verificar la información aportada por quienes como Mancuso buscan además de reivindicar su pasado, conseguir beneficios de índole judicial.
